Encuentra tu lugar. Coloca tu calentador de cera eléctrico en una superficie estable cerca de un enchufe—porque este ambiente está a punto de encenderse.

Déjalo caer como si estuviera caliente. Coloca suavemente una o dos de tus ceras derretidas favoritas en el plato en la parte superior del calentador. Cargando aroma de lujo.

Enciende tu calentador y deja que se caliente.

Respíralo. A medida que la cera se derrite, tu espacio se llena con la fragancia elegida. Relájate y deja que las vibraciones se apoderen.

Es hora de limpiar la casa. Después de disfrutar de tu fragancia, coloca una bola de algodón en el plato para absorber la cera restante. Es rápido, limpio y está listo para la próxima aventura aromática.

Límpialo. Una vez que la cera se haya ido, limpia suavemente el plato con un paño suave. Manténlo lujoso, manténlo fresco—porque tu próximo aroma merece un escenario perfecto.

Nuevo aroma, nuevo comienzo. Después de haber limpiado el último rastro de cera, es hora de colocar tu próxima cera derretida favorita. Colócala en el plato, enciende tu calentador y deja que la fragancia se apodere. Porque cada ambiente merece un reinicio.